La enseña que Belgrano nos legó
◘ Alicia Vicchio ◘ Belgrano izó por primera vez la insignia con los colores de la casa Borbona que ya había elegido el Triunvirato para la escarapela. La primera de todas -ocultada por la historia- fue en Isla del Espinillo, frente a Victoria, en la provincia mesopotámica de Entre Ríos. La narrativa histórica oficial da a la ciudad de Rosario (provincia de Santa Fe de la Veracruz), como la cuna de la Bandera e indica que en ese lugar fue enarbilada por vez primera.
Este año 2012 se celebra el "Día del Bicentenario de la Creación y Primera Jura de la Bandera Argentina" en conmemoración a ese hecho acontecido en Rosario el 27 de febrero de 1812.
RIVADAVIA REPRENDE A BELGRANO • Enterado de este acto el Triunvirato de Buenos Aires, lo obligó –mediante escrito firmado por Rivadavia- para que “abjure de esa bandera y hacerla desaparecer”. ¡Don Manuel, ese varón de la independencia, reprendido por las autoridades porteñas que le habían ordenado deshacerse de su creación con la exigencia que "vuelva a izar la roja y gualda (amarilla) de la corona española”! Belgrano, enfurecido, insistió en su empeño soberano pocos meses más tarde.
Ya en 1813, rumbo al Alto Perú, decidió festejar otro aniversario de la proclama de Mayo y reemplazó el estandarte de la casa real española por celeste, blanco y azul celeste paseándola por todas las ciudades.
SOBERANO • Manuel José Joaquín del Sagrado Corazón de Jesús Belgrano, hizo jurar por la bandera Argentina a las tropas del Ejército del Norte en el vado del antiguo camino real de Salta, a orillas del río Paraje, luego llamado Juramento a raíz de este acontecimiento histórico. El general dijo al pueblo “ Vosotros sois testigos de la bandera nacional que está en mis manos y nos distingue de las demás naciones”
Rivadavia, fue más al ataque: “Tamaño desorden debe ser reparado por Ud. mismo. Y debemos prevenirle que esta será la última vez que Ud. sacrifica los respetos de su autoridad y los intereses de la Nación”. Palabras que demuestran que siempre hubo representantes del extranjero que hablaron en nombre de la Patria. Y es que en Buenos Aires, no querían desagradar a España, y mucho menos a la Gran Bretaña.
El triunfo de la Batalla de Salta hizo avanzar al revolucionario hasta el Alto Perú, en Potosí ordenó acuñar la moneda con el Escudo Nacional, que había aprobado la Asamblea del Año XIII.
Belgrano no era militar, era un estadista, por ello se dedicó a administrar las nuevas conquistas y no a asegurarlas, por eso los realistas lo sorprendieron en Vilcapugio y Ayohuma.
La retirada fue penosa, para proteger las banderas del ejército norteño fue a la capilla del curato cercano de Macha y escondió dos pendones detrás de un cuadro. Pasado el desastre, fue reclamado por el Gobierno de Buenos Aires, para iniciarle un proceso por las derrotas sufridas.
Belgrano se defendió y le escribió a Rivadavia:“Despreocúpese Ud. desharé mi bandera, para que no haya memoria de ella y la reservaré para el día de la gran victoria. Y –como aún está bien lejos- todos la habrán olvidado”. El patriota fue relevado y enviado a misiones diplomáticas.
LAS BANDERAS DE MACHA Y DE AYOHUMA • La primera Bandera Nacional quedó en el olvido, hasta que 72 años después, en 1885, un párroco de Macha, pueblo boliviano, encontró dos banderas detrás de un cuadro de una virgen: una azul, blanca y azul y otra, mejor resguardada por un paño de seda rojo, que portaba los colores invertidos: blanco,azul celeste y blanco, con rastros de sangre y pólvora. Fueron enviadas al Museo de la Independencia en Sucre.
Desde ese entonces, se conoce a la bandera blanca,azul,celeste y blanca como Bandera de Macha, y a la bandera azuceleste y blanca como Bandera de Ayohuma, que datan del año 1812, usadas por las tropas patriotas.
Conocido el hallazgo, la Argentina solicitó la devolución de los emblemas, alegando que eran insignias pertenecientes a la historia de los argentinos.
En 1816, el Congreso General Constituyente de San Miguel de Tucumán contó con la participación de diputados que representaron a Tarija y otras zonas al norte de Argentina, actual Bolivia. En esa sesión se confirmó el uso de la bandera creada por Manuel Belgrano como la única de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Adoptó al emblema como símbolo patrio y resolvió que los colores fuesen azul-celeste y blanco.
El gobierno de Bolivia entregó la de Ayohuma, pero conservó la de Macha, la que Belgrano enarboló por vez primera en Santa Fe, que duerme su sueño de gloria en suelo boliviano
En 1818 se le incorporó el inti incaico, (inti = sol, en quechua) o Sol de Mayo, como lo denominó el propio general.
En 1939 el Congreso de la Nación Argentina sancionó la ley que declaró al 20 de junio, fecha de la desaparición física de Belgrano, como el Día de la Bandera.
Manuel fue un ser capaz, inteligente, que estudió metafísica, agricultura, finanzas, comercio, que hablaba idiomas y tenía una visión integradora.
Este 2012, fue declarado el “Año de homenaje al doctor Manuel Belgrano” para adherir a las celebraciones por los 200 años de la creación del emblema nacional.
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